lunes, 11 de julio de 2011

El faro


Qué extraña sensación,
esta hermosa canción
que viaja para llegar a mis oídos
sin ser cantada.

Esta luz que veo
como me alumbra por momentos,
este faro
que por veces
me hace ver donde me encuentro,
y otras me abandona para encontrarme.

Me doy un baño en la noche
mientras todos duermen
para dejarte viajar por mi cuerpo
las lunas que decides visitarme.

Juego con el agua transparente
y buceo para ver si estás allí,
pero siempre apareces sin saber
de donde has venido.

Trato de fijar mi mirada en ti
y así no perderte,
pero me hipnotizas con tus ojos
y me despierto con la luz del sol
sobre la arena,
desorientada,
sin saber...

miércoles, 6 de julio de 2011

Pide un deseo


Palabras...

Palabras que se contradicen,
que no encuentran actos en los que apoyarse,
pero yo me dejo engañar por tal disfraz.

Palabras...
se las lleva el viento
y con ellas se va la ilusión
que ha enraizado y no se quiere marchar,
dejando al descubierto la desnuda realidad.

Pero la realidad
me deja ver.

No sé si quiero ver,
no sé si debo seguir buscando
despierta o dormida.

No sé si simplemente
debo dejarme encontrar.

He visto una estrella fugaz
y se ha llevado mi deseo sin cumplirlo.
Cada noche la busco
para reclamar lo que me pertenece,
pero no la he vuelto a ver.

La próxima vez solo pediré que no se vaya
y que comparta su magia hasta el amanecer.

Cuanto más espero
más desespero
y creo sentirla pasar
cuando parpadeo.

Aquí estoy,
solo lo que ves,
no busques más
porque no tengo más que ofrecer.

Pronuncia las palabras mágicas
y acudiré.

Esperando el amanecer


Sale el sol,
mis lágrimas empiezan a secarse
y una imagen borrosa se presenta ante mi.
¿Ya es de día?
¿Ya ha pasado la tormenta?

No quiero abrir los ojos,
la luz me hace daño,
solo quiero estar bajo las sábanas
y esperar que el mundo
en su constante cambiamiento
me ofrezca algo mejor.

¿Cuántas vueltas quedan?
¿Cuántas noches debo hablar con la soledad?

Es tarde,
es pronto,
no es el momento
ni el lugar,
nunca me encuentro dónde debo estar
siempre me indican otro camino
"este no es su camino,
de la vuelta y coja la próxima desviación".

Estoy cansada de girar y girar
y no encontrar la salida de este laberinto.

Busco indicaciones,
pero no sé leerlas.

Eternos errores,
me paso la vida corrigiéndolos,
reconstruyendo todo el desastre
que queda tras de mi.

¿Ya es la hora?
¿Ya ha amanecido?
¿Queda alguien conmigo?

sábado, 2 de julio de 2011

Una y otra vez.


En la orilla del mar observo
el constante horizonte.
Estoy tranquila,
la brisa peina mis cabellos
y el cielo despejado
me hace creer que puedo
escapar de este mundo
con solo mirarlo.

Pero apenas puedo llegar a creerlo
llega el mar que en forma de ola
me golpea y me hace caer,
me envuelve y me arrastra con ella
para abandonarme en la orilla
completamente mojada y llena de arena.

Trato de recuperarme del golpe,
de limpiarme lo mejor posible,
de volver a ver el cielo
de creer en el sol
y en el horizonte infinito,
pero de nuevo llegas
y bates contra mi.

¿Cuántas veces podré volver a levantarme?
¿Cuántas fuerzas me quedan?

Me hipnotizas con tu vaivén,
con tus caricias saladas,
y no logro abandonarte.

Tratas de arrastrarme con tu marea
para devolverme con la siguiente luna,
y yo te espero en la orilla,
siempre te espero.