Te puedo decir
lo que hice
y lo que no hice,
para acabar
como siempre
en una habitación desconocida.
Te puedo decir
a quien vi
y a quien no vi,
también a quien eché de menos...
Cuatro almas,
cada una con su sombra,
siguiendo un sendero
distinto del mío.
Siento cuando miran el cielo,
y veo en el reflejo de la luna sus rostros.
Están bien,
me recuerdan menos de lo que quisiera,
pero siempre con esa magia especial que nos une.
Me basta,
están ahí,
y están bien.
Yo los recuerdo más
de lo que piensan.
Nunca fui de muchas palabras en la distancia.