La vida me ata
y tira de su lazo;
quiere que la siga
sin hacer demasiadas preguntas,
no se a donde me lleva...
No tengo valor
para ir contracorriente,
o me faltan fuerzas,
o mi voz no se oye.
Ella no entiende
que ya camino sola,
ella no entiende
que mis pasos pesan
y van dejando su huella.
Detrás de mi,
a lo lejos
veo un camino,
fulgurante,
una revelación
de que ese es mi lugar,
que dejo escapar sin un lamento.
Debo luchar
por llegar,
sin derramar sangre por ello.
Debo apender
a hacer que me entiendan.
1 comentario:
Los secretos de los hilos,
los secretos de las palabras,
los secretos de los hechos,
los secretos de la vida.
Nuestros secretos,
quizás no hay.
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