lunes, 16 de agosto de 2010

Coccola


La noche ha llegado y con ella todos los pensamientos apartados durante el día.

Es el momento de empezar de nuevo, de borrar todos los errores y construir una vida nueva, quizás vuelva a estropearla y el engaño no perviva más de unos meses. El verdadero ser siempre acaba surgiendo, pero tal vez ese ser se deje modelar en una vida nueva sin viejos trastos que reparar.

Si, creo que puedo abrir la ventana y respirar hondamente sin abrir los ojos, sentir como mis pulmones se llenan de vida para finalmente meterme en cama sin pensar en nada, pensando únicamente en despertar por la mañana.

Quiero llevar luz a dónde vaya y dejar las sombras en aquel lugar lejano del que huí, luchad vosotros por mi contra ellas y cuando las hayáis vencido avisadme.